Santiago Mora Asían "El Curita "
Nacido el 3 de Marzo de 1950.
Julian Romero n· 38 - Sanlúcar la Mayor
Hijo de Eduarda y Santiago "el Corchao"
Vivió toda su juventud junto a sus padres en la casa de la calle mercado,heredero junto a sus hermanas la finca que está detrás de la casa, junto a los resto de murallas del recinto de la vieja mezquita de actual iglesia de San Pedro,herencia de su bisabuelo Francisco Mora "el Corchao".
El Apodo del Curita le viene por la arboleda que aún mantiene junto a las murallas de San Pedro,por sus amistades con los vecinos de la calle fuentes origen de los aficionados que allí se citaban,le pusieron el apodo de el Curita, y así lo mantiene hasta estos días.
Su afición le viene desde pequeño,solía entrenarse en la arboleda de su padre con un trapo rojo, cuando tenía 10 años su padre le propuso al alcalde D. Lázaro Rodríguez que le echara una vaquilla a su hijo que quería ser torero,Lázaro le contestó que aún no tenía edad para ese capricho.Con 12 años trabajaba en la Granja del chalet de villa Carmelita ( Camino del "Hollon")propietario de un Teniente Coronel,cuidaba de 2.500 gallinas,un montón de cochinos una vacas, un caballo y un mulo,su padre tenía cuatro becerros que Santiago solía segar la yerba cada día para su alimento. Con 14 años entra a trabajar junto a su padre en la estaca de "cerero",ganando 250 pesetas donde tomaría con más deseo el querer ser torero.Fue con 14 años cuando en la finca de Don. Carlos Melgarejo en uno de aquellos días de tientas cuando el maestro Canova le propuso que toreará una de las vaquillas de la finca,
En la finca de los Pablo Romero
Uno de estos días Santiago estando segando hierba para los becerros de su padre cerca de la finca la Herrería de Pablo Romero,tuvo un pequeño percance con uno de los toros de la finca,con un saco y una hoce se pone delante de un semental para darle unos pases.Antonio Monte vaquero de la finca vio como Santiago buscaba al semental entrando bajo los alambres,llamando al toro para llevarlo a su terreno, Santiago logra darle tres pases,Antonio Monte con su caballo logra apartar el semental evitando un peligro mayor,Santiago a pesar de sus miedos era atrevido en sus decisiones,a pesar que en muchas de sus desiciones fueran frustadas.Al maestro Canova no le gustaba que sus alumnos entraran en la finca de los Pablo Romero furtivamente,por su amistad con los dueños se enfadaba mucho cuando alguno de sus alumnos hacían estas faenas sin consultarlo a él.Don Pablo Romero tuvo siempre muy bien mirado a los aficionados de Sanlúcar la Mayor,en las tientas de sus fincas siempre fueron los primeros, favoreciendo a estos antes que los demás.
A la finca de Hato Rato de Carlos Melgarejo
Una noche de invierno en la madrugada,sale de la calle mercado con destino al partido de resina a la finca de Hato Rato de Carlos Melgarejo,su madre sospechando las intenciones de su hijo,le esconde sus ropas,Santiago encuentra unos pantalones vaqueros rotos,una camisa y unos zapatos viejos amarrados con una guita ( cuerda),saltando por el balcón corrió a sus destino,cuando llego a Villamanrique vio como unos gitanos peleaban entre sí,pero Santiago siguió su camino a través de los matorrales lloviendo a mares en esa noche sin luna camino de la finca.,llegando en la mañana vio como entraba en la finca Manolo "Sanlúcar" montado en su coche Mercedes y los demás aficionados para este día de tientas.
De Espontáneo
La primera vez que toreo en la plaza de toros de Sanlucar ( 1968 ),se tiró de espontáneo en un toro de Manuel García “Palmeño”,fue contratado como camarero para la feria de Sevilla por Juan de dio Pareja Obregón para su caseta,estando trabajando en la caseta Juan de dios pareja obregón le comunica que para feria de Sanlucar torea como sobresaliente,preparando el cartel de la corrida tomó el nombre de Santiago Mora "El Curita"hizo el paseillo como sobresaliente con José Rivera Pérez, apodado «Riverita»,( Hermano de Paquirri ) acompañado por Ramón "Villa Huevo".En la furgoneta del "Paino" fueron a un festival Concurso de Alcalá de Guadaíra con toros de distintas ganaderías entre ellas la de Concha y Sierra,entre los más conocidos estaban Curro Romero , Paco Camino, Diego Puerta.José Canova le presta una muleta y que posiblemente le dejaran torear,uno de los toros de Concha y Sierra salio muy malo,y le aconsejaron que no lo toreara.
Con el Maestro Canova
Santiago fue uno de los discípulos del maestro José Cárdenas "Canova",uno de sus favoritos en los entrenamientos que solían realizar en la corredera junto a la vieja fuente,acompañaba a canova en todo momento, participando en las capeas y en los cortijos de los ganaderos cuando se presentaba faenas.Estando en la finca de la Herrería de D. Pablo Romero, solían capar a los cabestros , uno de los cabestros de aproximadamente de 2 años y medio,Canova dijo !!este será para el Curita!!, "hoy este parte el bacalao",( se refiere a que tendrá buena faena ),Santiago tenía una personalidad de buena gente ante sus compañeros,algo de miedo,pero con valentía se enfrentaba a sus adversarios.,el cabestros le dio una paliza que no le dejo ropa en el cuerpo.
Santiago se entrenaba mucho para estar en forma en todo momento,en una de las ocasiones se tiró a nuestra plaza,con una caída al albero en seco, la gente gritaban !!dejarlo!!dejarlo!! se dirige al novillo cuando Canova le retira la muleta por detrás y no pudo torear,primero se tiró Mariano Martínez, Don Antonio el médico le dijo a canova que le hubiera gustado ver torear a Santiago.Fue uno de los tertuliano en el bar de Enrique,cuando se reunía con sus compañeros y Canova hablaban de toros.,Santiago solía quedarse dormido y canova le reprendió por no estar atento,Santiago solía levantarse muy temprano para trabajar y su falta de sueño le hacía quedarse dormido en estos momentos,Santiago era un muchacho muy inocente y sin maldad,sus compañero solían gastarle bromas,todos los aficionados de la escuela del maestro Canova estaban deseando la oportunidad de poder torear,J. pareja Obregón solía llamar mucho a estos chavales para su finca los días de tientas,donde tendrían la oportunidad de darle unos pases a su ganado,algunos de sus compañeros con afán de ser ellos protagonista solían no llamar a Santiago a pesar de ser requerido por el propio ganadero Pareja Obregón.
Manolo "Sanlucar" y Antonio "Guerrita"
En la segunda mitad de los años 60s, Manolo "Sanlucar" y Antonio "Guerrita" eran novilleros y ambos solían tener sus corridas,la mayoría de los alumnos de la tercera tanda de la escuela de Canova solían apoyar más a Antonio "Guerrita" por ser menos favorecido, ya que Manolo " Sanlucar" fue apoderado por J. Pareja Obregón durante varias temporadas,aunque sus formas de torear eran distintas,solían ser más solidarios con el que menos corridas tenia.Antonio y Manolo a pesar de haber sido compañeros en la escuela de Canova,tenían sus rifé rafe de vez en cuando, cada uno tenía su afán de torear y esto les convertía en enemigos en estos primeros años,tanto fue esta guerra taurina que la afición Sanluqueña se dividió en dos,por llamarlo de alguna manera, a Guerrita decían que lo apoyaban los aficionados "pobres" y a Manolo los aficionado "ricos" ,( "cosas de los pueblos" ).
En el recuerdo
Santiago Mora Hacían "El Curita " no tuvo la oportunidad que él hubiera querido, fue apartado por sus compañeros en muchas de las ocasiones por la competencia y rivalidad propia de los jóvenes aficionados de ser protagonistas,sus aventuras quedarán en el recuerdo de estos años vividos,el sueño de ser torero le llevó a enfrentarse en ocasiones a la muerte, o ser herido en algún momento de sus enfrentamientos con los toros.
Hoy, sus recuerdos después de 60 años desde sus primeras aventuras, Santiago "El Curita " nos desvela su pasión toreril desde su huerta junto a la muralla a la que a pesar de haber estado delicado de salud en estos últimos años, su recuperación progresiva le alienta a realizar algunas faenas en su huerto a la que acude cada día para conservarlo para sus hijos el día de mañana.
La fuente de los recuerdos,
el pilar que calmaba la sed a tu paso por la corredera.
Si hubieras nacido antes,
sabrías de hermosas historias,
que sólo las viejas piedras
que cubren la fuente
guardan en su memoria.
Si quieres, puedo contarte cosas
sobre ese viejo pilar
que ahora relumbra y centellea,
tras años de lenta agonía.
O alguna de aquellas muchachas,
testigos de atardeceres
preñados de promesas de amor,
te contaría entre sonrisas nostálgicas
el palpitar de la calle
cuando, jóvenes aún y hermosas,
con el cántaro de barro,
y el rubor en las mejillas
hacían el camino a la corredera.
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